By OMAR SEGURA
EFE/Reportajes
Detectan el cáncer antes de que se manifieste, mejoran
los cuadros de insuficiencia cardiaca, ayudan a adelgazar y benefician
la salud mental
Las últimas investigaciones médicas sugieren que
los perros son el mejor amigo del hombre, no sólo debido
a la fidelidad, compañerismo e inteligencia que se les
atribuye a las mascotas caninas en su relación con los
seres humanos, sino también por sus asombrosas capacidades
para mejorar nuestra salud.
En 1989 se conoció el caso de una mujer que buscó
asistencia médica después de que su perro mostrara
mucho interés por una lesión epidérmica que
finalmente se comprobó que era cancerosa. Se ha informado
de otros episodios similares con tumores de mama o pulmón,
y varios experimentos han demostrado que los perros pueden detectar
el cáncer en la vejiga.
Científicos del hospital Amersham, en Buckinghamshire,
en el Reino Unido, buscan desarrollar un instrumento de diagnóstico
que sea tan eficiente como el olfato canino para reconocer los
primeros indicios de tumores.
Dado que se supone que los cánceres producen un olor característico,
y se sabe que los perros tienen el olfato muy desarrollado, los
investigadores decidieron comprobar este fenómeno entrenando
a un grupo de canes de distintas razas y edades para que distinguieran
entre orina de pacientes sanos y la de otros con cáncer
de vejiga.
Los animales acertaron la muestra correcta en 22 de 54 ocasiones,
cuando se les hizo olfatear a cada uno siete muestras de orina,
de las cuales sólo una era de un paciente con cáncer.
Además sucedió algo inesperado. Durante el ensayo,
todos los perros seleccionaron como positiva la muestra de una
persona supuestamente sana, a la cual se le hicieron más
pruebas médicas, descubriendo que tenía un tumor
en un riñón. Al parecer, cada cáncer tiene
un olor particular y los canes son capaces de detectarlo.
CARDIOTERAPIA CON MASCOTAS
Un equipo de investigadores liderado por la enfermera clínica
Kathie Cole, del Centro Médico y de la Facultad de Enfermería
de la Universidad de California en Los Angeles (UCLA), ha comprobado
que la visita de apenas 12 minutos hecha por un perro consigue
mejorar la función pulmonar y cardiaca de las mujeres y
hombres hospitalizados por insuficiencia cardiaca.
Anteriormente se había demostrado que la terapia asistida
por animales reduce la presión arterial y el ritmo cardiaco,
así como los riesgos cardiovasculares, además de
disminuir la ansiedad, el aislamiento y el temor, a la vez que
mejora las interacciones sociales en los pacientes que están
hospitalizados.
Pero, según Cole, ``éste es el primer estudio que
muestra que una terapia de este tipo puede utilizarse como complemento
eficaz del tratamiento para mejorar la función pulmonar
y reducir los niveles neuroendocrinos en pacientes de insuficiencia
cardiaca crítica y aguda''.
Los autores del estudio trabajaron con 76 pacientes, a los que
se dividió en tres grupos: los que recibieron la visita
de un perro y un voluntario, los que recibieron a un voluntario
solo y los que no fueron visitados.
Los investigadores partieron de la idea de que una terapia de
este tipo podría influir sobre la función cardiaca,
la activación neuroendocrina y los cambios en el estado
de ánimo ocasionados por el estrés de vivir con
una enfermedad mortal y crónica.
Su ensayo confirmó la hipótesis: quienes fueron
visitados por un perro --el cual se sentaba al lado de una silla
o se acostaba junto al paciente en la cama para que éste
pudiera acariciarlo o hablarle-- vieron reducida su ansiedad,
sus niveles de epinefrina --la hormona del estrés-- y la
presión sanguínea en su corazón y arterias.
ADELGAZAR PASEANDO AL PERRO
Un estudio de las universidades estadounidenses de Missouri y
Columbia afirma que tener un perro puede ayudar a las personas
a hacer más actividad física y a perder peso.
Los investigadores buscaban formas de aumentar el régimen
de ejercicio promedio en las personas y para su sorpresa encontraron
que tanto ser responsable de una mascota, como comprometerse a
sacar a pasear la de otros, estimula a las personas que no poseen
perros a caminar más a menudo y durante más tiempo.
En el estudio, quienes tomaron la costumbre de pasear con canes
perdieron una media de seis kilos de peso durante el programa
de un año de duración, un resultado considerado
mejor que los de algunos regímenes populares de adelgazamiento.
LADRIDOS QUE RELAJAN
La terapia con mascotas se está popularizando en instituciones
de todo el mundo y sus beneficios han sido probados.
Según Delta Society, una organización líder
en este campo y que viene estudiando la relación entre
las mascotas, sus dueños y los prestadores de asistencia,
el contacto frecuente con animales domésticos agrega al
menos un año a las tasas de supervivencia de la cardiopatía
coronaria, contribuye a disminuir la presión arterial y
el nivel de estrés y a socializar a los niños pequeños.
Además, los ancianos que tienen perros van al doctor con
menos frecuencia, los dueños de animales domésticos
soportan mejor las contrariedades graves, y las mascotas acompañan
a los niños y elevan su autoestima.
Según expertos de la Organización Panamericana
de la Salud, la terapia con mascotas podría integrase a
las estrategias de salud mental, ya que es muy importante tener
relaciones y los animales ayudan, mientras que para muchos pacientes
no sólo resulta terapéutico el tacto o el contacto
físico de una mascota, sino también el hecho de
cuidarla.